Me invade una sensación de extrañeza, desde esta habitación, al recordar la torpeza de aquel encuentro, el primer roce con un hielo suave y seductor que en nada presagiaba el mayor de los iceberg. Las fotos de aquel instante se entremezclan con las imágenes veladas de mi memoria. El contorno de sus piernas, sus gemelos poderosos de piel blanquísima, la sencillez de su vestido negro.
No recuerdo bien como fue, iniciaba la retirada y ella me miró con curiosidad, sentí ese morbo de haber sido pillado en falta y a la vez la valentía de la seducción. Se acercó hacía mi...
viernes, 2 de octubre de 2009
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empiezo a sentirme como corin tellado xD
ResponderEliminarpero en pobre
ResponderEliminaruhm... se admiten críticas?
ResponderEliminarno me gustan los finales tan... directos? que te dicen tan claramente que va a haber un giro en el siguiente capítulo.
Me sobra esa última frase, del resto, ninguna pega.
;)
bueno... en realidad dejé una frase a medias... no es un gran giro...
ResponderEliminarahora sí
ResponderEliminar;)
sigue, sigue, que promete :)
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