Se acercó a mi, y me dijo algo en un ininteligible perfecto inglés. Mengüé dos palmos y balbuceé un -what. Ella se dio cuenta que debía de comunicarse conmigo despacio y con vocabulario infantil; armándose de paciencia lo intentó de nuevo.
Esta vez le entendí y mi respuesta no pudo ser más tonta -I like japanese girl. No sabría decir ningún razonamiento más complejo. Ella se río de una manera franca y directa, nada que ver con la risita adolescente y vergonzosa que tantas veces había visto en los concursos de televisión nipones. Me pidió permiso para ver las fotos y creo que quedó satisfecha, garabateo en su cuaderno una dirección de correo electrónico y un nombre, y me pidio por favor que se las mandara. Se alejó y me quedé allí como una estatua mirando la hoja de papel recién arrancada y casi caliente. Yahiro.
martes, 6 de octubre de 2009
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ohh...!
ResponderEliminarque... ayshh
mola?
ResponderEliminarSólo conoces realmente a una persona cuando la has escuchado reirse de forma franca y directa.
ResponderEliminarMe gusta.
como retratista no tienes precio :)
ResponderEliminarme gustan esas risas a "boca llena"
gracias... ya tengo gasolina para seguir :)
ResponderEliminaryo
ResponderEliminarquiero más
:)